sábado, 31 de marzo de 2012

Cómo calibrar eficazmente nuestras metas


Confiar en uno mismo y elevar constantemente la valla es tan importante como el medir con realismo y objetividad las metas que nos trazamos, esto para evitar asumir riesgos o iniciar proyectos que de no alcanzarlos podrían innecesariamente mermar nuestra capacidad física, emocional, profesional o nuestros recursos económicos.
Para tocar este teme quiero presentar a Jean PaulGetty quien acumulo su primer millón de dólares con tan solo veinticuatro años de edad y a los sesenta ya era uno de los hombres más opulentos de la tierra, después de amasar su fortuna, que sobrepasaba los mil millones de dólares, gracias a su visión estratégica, su capacidad para evaluar inversiones y desarrollar los negocios petroleros que emprendió sobre la base de la experiencia acumulada en el negocio que fundó su padre.
En esta lección tomada de su libro, The Golden Age, el señor Getty nos enseña una sencilla técnica que te permitirá sopesar cualquier oportunidad que se presente contra los recursos que dispones, de tal manera que puedas incrementar tus posibilidades de tomar la decisión correcta antes de apresurarte a aprovecharla. Espero les resulte tan útil como me resulto a mí:

Cuando joven, mi ambición y mayor deseo era ingresar al Servicio Diplomático de Estados Unidos y, siempre y cuando me lo permitiera mi carrera, me dedicaría a una vocación secundaria de escritor. Probablemente, lo habría logrado, de no ser por el hecho aparentemente inconexo de que era hijo único.

Eso significó toda una diferencia decisiva. Alguien tenía que encargarse de los negocios de mi padre, George F. Getty, levantados a lo largo de muchas décadas de ardua y dedicada labor. No era que yo fuese el candidato más adecuado, ni siquiera el más lógico; simplemente sucedió que era el único disponible.

Le aseguro que la idea de estar al frente de un negocio de regular tamaño y con gran éxito no solamente estaba muy lejos de mis ambiciones originales, sino que era un prospecto formidable y perturbador. Las responsabilidades y problemas concomitantes no sólo eran grandes, pesados y ominosamente opresivos, sino que además no había salidas de emergencia por las que sin cargo de conciencia pudiese evadirme, sobre todo teniendo en cuenta que también estaban involucrados la seguridad y el bienestar de mi madre.


viernes, 23 de marzo de 2012

La parábola del conducto: El primer paso hacia la libertad financiera



Para empezar por lo básico el tema de finanzas personales quiero presentarles un video basado en el libro “The parable of the pipeline” o “La parábola del conducto” de Burke Hedges, que nos muestra la importancia de construir poco a poco múltiples fuentes de ingresos que no estén ligadas a nuestro empleo o actividad central. El objetivo es que con el tiempo estas fuentes de ingresos se fortalezcan al punto que nos permitan ser financieramente independientes.
El video solo dura 10 minutos, sin embargo, el objetivo es que reflexiones un tiempo adicional a fin de ver hasta qué punto te identificas con los personajes y que cambios podrías hacer desde hoy para ver los beneficios en el futuro.

miércoles, 21 de marzo de 2012

¿Compites o actúas por iniciativa?




¿Seleccionas tus metas en base a iniciativas propias o eres de los que se centran en competir y superar a las personas de tu entorno?, la respuesta a esta pregunta podría darte una idea de que tanto dejas que otras personas influyan en la determinación de tus metas y por tanto en lo que podrás lograr en tu vida.
Cuando era un adolecente mi entrenador de Basketball menciono una frase que siempre la recuerdo “Nunca llegaras mas lejos de lo que tu mismo te propongas llegar”. Es por ello que definir a donde queremos llegar, que objetivos alcanzar, que acciones tomar, debe ser una elección que surja de nuestra iniciativa.
En esta entrada los invito a cuestionar algunos supuestos que tenemos sobre el habito de competir, para ello voy a citar a William y Marguerite Beecher autores del libro “Beyond Success and Failure” o “Mas allá del éxito y del fracaso” quienes nos presentan una perspectiva muy interesante que amerita ser leída con atención:

La competencia esclaviza y degrada a la mente. Es una de las formas de dependencia psicológica más prevaleciente y, ciertamente, más destructiva de todas. En algún momento futuro, si no se supera, produce un individuo estereotipado embotado, imitativo, insensible, mediocre consumado y desprovisto de iniciativa, imaginación, originalidad y espontaneidad. Es un ser humanamente muerto. ¡La competencia produce muertos en vida! ¡Nulidades!

La competencia es un proceso o una variante del comportamiento habitual que se desarrolla a partir de un hábito mental. Se origina debido a nuestra necesidad de imitar a los demás durante nuestra primera infancia, pero es indicio de un infantilismo persistente si sigue dominándonos después de la adolescencia. Es señal de un desarrollo psicológico retrasado, una actitud pueril persistente de "Lo que el mono ve, el mono hace". Nos encontramos atrapados en la imitación.
Una vez establecida en órbita como una forma habitual de considerar las relaciones interpersonales, contamina todas nuestras relaciones. Se convierte en una forma de relacionarnos con el mundo, con los demás seres humanos y de enfrentarnos a las situaciones. La competencia es asesina, porque despoja al individuo de su iniciativa y responsabilidad personales.

sábado, 17 de marzo de 2012

Carta a los jóvenes de Carlos Slim


Revisando la revista norteamericana Forbes encontré la versión 2012 de su popular ranking “The World’s Billionaires” o “Los multimillonarios del mundo” en el que Carlos Slim, un mexicano propietario de un conglomerado de empresas conocidas como Claro, Telmex, entre otras,  encabeza la lista dejando atrás nada menos que a los norteamericanos Bill Gates, propietario de Microsoft y a WarrenBuffett, quien es conocido por ser el mejor inversionista en la bolsa de valores de todos los tiempos.
La curiosidad me llevo a investigar un poco sobre la vida de Carlos Slim y fue así que llegue a su página web en la que encontré una interesante carta que escribe para los jóvenes y que es motivo de esta entrada en mi blog.
Antes de compartirla considero pertinente recalcar lo expuesto en anteriores entradas: “El éxito es un viaje y no un destino”, consiste en vivir la vida con un propósito definido, con energía, disfrutando de cada momento, cada actividad y cada reto. Nada más alejado del concepto de éxito que el creer que acumulando cierta cantidad de dinero nuestra vida se transformará automáticamente en un paraíso.

Teniendo esto claro comparto con ustedes las valiosas reflexiones que encontré en esta carta, que no está centrada en concejos financieros, pero si aporta valiosos mensajes que resultaran muy útiles para direccionar nuestra forma de pensar y actuar.

Carta a los jóvenes

A través de una Carta a la comunidad universitaria, Carlos Slim, aconseja a los estudiantes más destacados sobre lo que, a su forma de ver, considera lo importante en la vida.
México, D.F., junio de 1994
Les escribo esta carta con el fin de transmitirles un poco de mi experiencia en la vida, buscando contribuya a su formación, a su manera de pensar y de vivir, a su equilibrio emocional, a su sentido de responsabilidad para con ustedes y para con los demás, a su madurez y, sobre todo, a su felicidad, que debe ser producto de su ser y quehacer cotidiano.
Son ustedes privilegiados dentro de la sociedad, gracias a su talento y esfuerzo, por la mejor razón, su propio valor.
El éxito no es hacer bien o muy bien las cosas y tener el reconocimiento de los demás. No es una opinión exterior, es un estado interior. Es la armonía del alma y de sus emociones, que necesita del amor, la familia, la amistad, la autenticidad, la integridad.

viernes, 9 de marzo de 2012

Cambiando tu perspectiva del fracaso



En esta entrada quiero tocar el tema del fracaso y para ello quiero presentarles la visión que sobre este tema nos ofrece Jhon C. Maxwell, un connotado orador y prolífico escritor de best sellers sobre temas de liderazgo. En su libro “El Lado Positivo Del Fracaso” nos anima a cambiar radicalmente nuestra  perspectiva sobre el fracaso y los paradigmas tradicionales asociados a este tema a fin de programarnos para perseverar hasta alcanzar nuestros objetivos.
A continuación les dejo con esta interesante reseña tomada del mencionado libro sobre siete puntos relacionados al fracaso:

1. La gente cree que el fracaso se puede evitar, y no se puede

Todos fallamos y cometemos errores. Seguramente usted ha oído aquello de que «errar es humano, perdonar es divino» que Alexander Pope escribió hace más de doscientos cincuenta años. Lo que él estaba haciendo era nada más que parafraseando un dicho que era muy común dos mil años antes durante el tiempo de los romanos. Hoy las cosas son muy parecidas a como eran en aquel tiempo. Si usted es un ser humano, va a cometer errores.

Es probable que esté familiarizado con la Ley de Murphy y el Principio de Peter. Hace poco me encontré con algo que se ha dado en llamar Reglas para el ser humano. Creo que la lista describe bien el estado en que nos encontramos como personas:

Regla # 1:Usted tiene que aprender lecciones.
Regla # 2:No hay faltas, solo lecciones.
Regla # 3:Una lección se repite hasta que se aprende.
Regla # 4:Si no aprende las lecciones fáciles, se hacen más difícil. (El dolor es una
forma en que el universo consigue que se le preste atención.)
Regla # 5:Usted sabrá que ha aprendido una lección cuando sus acciones cambien.

Norman Cousins tenía razón cuando dijo: «La esencia del hombre es la imperfección». Entonces, convénzase de que va a cometer errores.

miércoles, 7 de marzo de 2012

Conozca, ame y crea en lo que hace



El gran Cavett Robert fue en vida el máximo orador norteamericano en el campo de la motivación, fundó la National Speakers Association (Asociación Nacional de Conferencistas) y fue empresario durante muchos años. En esta entrada quiero compartir con ustedes lo que Mr. Robert considera es la fórmula más segura conducente al éxito, la público en su libro “Success with people through humanengineering and motivation” tras escucharla en un discurso pronunciado por Will Rogers en el año 1935, a pesar del tiempo transcurrido considero que la formula está muy vigente, si no lo crees te invito a echarle un vistazo:

He leído incontables libros sobre el tema del éxito. He escuchado docenas y docenas de discursos sobre el mismo tema. Pero no creo que exista una fórmula más segura o un programa más acertado conducente al éxito, si se sigue en una forma consciente, que el descrito a continuación:

Si quieren tener éxito, declaró, es tan sencillo como esto.
- Conozcan lo que están haciendo.
- Amen lo que están haciendo.
- Y crean en lo que están haciendo.

Ahora vamos a estudiar estos consejos un poco más de cerca.

CONOZCA LO QUE ESTÁ HACIENDO
En primer lugar, deben conocer lo que están haciendo. No hay ningún sustituto para el conocimiento. En nuestro enfoque del conocimiento, debemos entender que la preparación es un proceso constante que no tiene fin. Debe moverse eternamente y jamás permanecer estático. La escuela nunca termina para la persona que en realidad desea triunfar.

Las constantes exigencias de reajustes ofrecen hoy día un desafío que nunca antes existió. La preparación ya no es algo que pueda guardarse en un cajón y después olvidarse de ella. El éxito mismo ha adquirido una nueva definición, e incluso podría calificársele como la preparación constante y continua de nosotros mismos para satisfacer los cambios constantes y continuos de nuestro sistema económico. Sí, hoy día el éxito es una jornada, no un punto de destino.

La excelencia no es un acto, es un hábito.



Benjamin Franklin, un tipo admirable, gran político, científico e inventor, un genio estadounidense, cuyo rostro podemos ver en los billetes de cien dólares nos dice en una de sus memorables citas: “La felicidad humana generalmente no se logra con grandes golpes de suerte, que pueden ocurrir pocas veces, sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días.”

Los hábitos que con el paso del tiempo vamos acumulando son los que forman y definen nuestra efectividad personal, desde como hablamos, como escuchamos, como pensamos, como actuamos en determinadas circunstancias y como reaccionamos a diversos estímulos, todo influye para moldear nuestros resultados en la vida.

La mayoría de personas encuentran que actualmente no llevan la clase de vida que quisieran y esto se lo deben a que en algún momento incorporaron, tal vez sin darse cuenta, hábitos autodestructivos que poco a poco van mermando su capacidad de crecimiento personal.

John Dryden. Declaro, “Primero formamos nuestros hábitos y después nuestros hábitos nos forman”. Horace Mann escribió, “El hábito es una cuerda. Cada día le tejemos un hilo y al final no podemos romperla”, y Samuel Johnson exclamó. “Las cadenas del hábito por lo general son demasiado pequeñas para sentirse, hasta que llegan a ser demasiado fuertes para romperse”.